HISTORIA PERSONAL
Mi nombre es Jaume Terricabras Conesa, estoy casado, padre de dos hijos, de profesión instalador de electricidad, fontanería y gas, nacido en La Garriga provincia de Barcelona en Mayo de 1.947, donde he vivido y trabajado siempre.
Mi afición a la radio empieza en mi infancia, viendo lo que hacía un vecino que se llamaba
Santi, que por aquel entonces estudiaba el curso de Radio Maymo y que me llevaba con el a su cuarto de radio donde realizaba los montajes, cosa que a mi me fascinaba viendo como había
construido una radio de galena y lo bien que se escuchaba. Su abuelo que fundó una Ferreteria y taller de reparaciones, fué representante de una importante firma de aparatos radio telefónicos , Royal
Rex , allí todavía quedaban aparatos y materiales que nunca llegaron a venderse, subir a la buardilla donde tenía su pequeño taller, era como transportarte a otros tiempos. Mi juguete preferido pasó
a ser un aparato de radio, que entonces mucha gente lo tiraban para adquirir otro mas moderno y con
el cual pasaba largas horas desmontándolo hasta la última pieza para intentar
descifrar el misterio o la magia que había en el interior de aquella caja de
madera que parecía tener vida propia y que a la vez servia para tener a toda la
familia reunida a su alrededor. Desde
muy joven empecé a guardar aparatos de radio y piezas que la gente despreciaba
por haberse quedado fuera de época, a recoger libros, revistas y todo lo que
estuviera relacionado con la radio, para poder estudiar y practicar a mi manera
de una forma muy precaria. Más tarde y gracias a mis padres, pude hacer el curso
por correspondencia de la famosa y ya desaparecida ESCUELA RADIO MAYMO que
tantos técnicos llegó a formar, sobretodo a nivel nacional y que según mi
criterio, fue la mejor y más importante escuela de radio de las que existieron
en la época dorada de la radio en España. Mi gran ilusión ya desde muy pequeño
fue la de poder trabajar de Radiotécnico, pero por circunstancias de la vida y
por vivir en un pueblo muy pequeño, no fue posible, cosa que me motivó todavía
más a continuar con mi afición de poder entrar en el mundo de la radio de la
manera que fuera, quería encontrar alguna persona que pudiera enseñarme, pero no
era posible, en aquellos tiempos el que sabia algo de radio, se lo guardaba para
él, era como Tabú el preguntar cosas de radio. Solo hasta hace pocos años no
encontré a esta persona que realmente me enseñó todos los trucos y la práctica
que hacía falta para poder reparar, sencillamente, me enseñó el oficio que el había tenído la suerte de poder aprender de manos del que llegaría a ser su suegro, don Antonio Pujals y de esta forma
poder acometer la reparación de
cualquier tipo de radio sin tenerle miedo, necesitaba un buen maestro que me
llevara de la mano para poder aprovechar lo que el otro maestro, don Fernando
Maymo, me había enseñado a distancia, de forma teórica, este hombre, paradójicamente, vivía desde
hacía mas de 30 años casi al lado de mi casa y no nos conocíamos. Fue como si se
hubiera abierto el cielo para mi, era la ilusión de toda mi vida y este gran
radiotécnico, Manuel Frutos , jefe técnico de RADIO PUJALS de Barcelona ha sido y es el que realmente me ha enseñado y
me enseña a ser Radiotécnico de verdad. Lástima que no nos hubiéramos podido
conocer antes, pero la vida es así y tiene estas cosas. El primer aparato con el
que realicé mis primeras experiencias de recepción,fue un receptor de galena
proveniente de la familia, el cual no ha dejado de maravillarme por el hecho de
poder escuchar la radio sin consumir ni pilas ni corriente, todo un misterio
altamente interesante. Dentro de esta afición sentí la necesidad de comunicarme
con otras personas también con las mismas inquietudes que yo y así, en el año
1.968 me construí mi primer transmisor de onda corta de telegrafía, aprovechando
un receptor de radio para la recepción, efectuando las primeras pruebas dentro
de este campo, con un amigo mío que vivía muy cerca de mi casa y con la sufrida
de mi hermana que era la que más cerca tenía para poder realizar mis
experiencias de radio transmisión. Después de ver las limitaciones que suponía
este pequeño emisor, opté por obtener el indicativo oficial de radioaficionado
en Telecomunicaciones, pasando los correspondientes exámenes y consiguiendo el
indicativo de “EA3FFP” cosa que me permitió el poder tener una emisora más
potente, pudiendo contactar con países de todo el mundo en busca de nuevas
amistades con gente aficionada al tema, llegando incluso a contactar con la
emisora de su Majestad el Rey de España del que conservo su tarjeta QSL y su
fotografía dedicada junto a su equipo de radio y que tuvo la gentileza de
enviarme, guardándolo como mi mayor trofeo. En el año 1.993 junto con otros
coleccionistas que nos habíamos ido conociendo, fundamos la ASOCIACIÓN
CULTURAL DE AMIGOS DE LA RADIO de la que soy secretario y
miembro fundador, reuniendo a casi medio millar de aficionados al
coleccionismo y a la restauración de aparatos de radio de España y de otros
países. Dentro de este colectivo se agrupan coleccionistas, historiadores,
técnicos y amantes de la radio en general, todos ellos vinculados muy
estrechamente con el mundo de la radio. Mi colección sobrepasa de un millar de
aparatos, empezando por los de chispa, galenas, lámparas vistas, de capilla, de
baquelita, de comunicaciones, de transistores etc. así como también altavoces
diversos, componentes, lámparas y una extensa bibliografía que me sirve para
poder investigar como fue el desarrollo de la radio a través del tiempo. Mi gran
debilidad es poder conseguir los receptores, restaurarlos y dejarlos lo mas
parecidos posible a tal y como eran en sus orígenes, funcionando correctamente.
Para mi la satisfacción que me produce el escuchar que un aparato vuelve a
funcionar, es indescriptible, es como si hubiera podido resucitar una cosa
muerta. En estos últimos años he tenido mucha surte de que en varias poblaciones
como la
Garriga, Vic, Sant Cugat y Taradell, existiera gente sensibilizada con
este tema que yo denominaría como “Arqueología de la Radio” y que me brindaran la
oportunidad de montar exposiciones de mi colección con la finalidad de poder
mostrar al público toda la historia y la evolución de la radio desde las
primeras experiencias con la transmisión de chispa hasta los aparatos a
transistores de los años 60-70 para que así, los mas jóvenes pudieran ver como era
y como ha sido la evolución de este gran medio de comunicación que revolucionó
el mundo y que además todavía tiene un largo camino por recorrer. Con todo esto
he podido constatar la gran expectación y el gran interés que despierta en el
público en general el poder visitar una exposición de estas características que
se aparta de la monotonía de las repetitivas exposiciones de cuadros, pinturas y
fotografías de las que ya están más que saturados. Mucha gente se identifica con
algún receptor que en su infancia lo habían tenido en su casa, puede ver aquel
receptor de galena del que le habían hablado pero que nunca había tenido ocasión
de ver al natural y saber como funcionaba, etc.
También me gusta mucho
escribir sobre el tema y por ello colaboro con varias publicaciones , siendo el redactor de la revista La Radio d'Época y además
pude ver realizada una de mis aspiraciones que fue la publicación del libro
“LA RADIO 10
AÑOS DE UNA AFICIÓN” donde se recogen las vivencias de un grupo de amigos unidos
por la misma afición, LA
RADIO, algunos de ellos, desgraciadamente desaparecidos. Como punto final decir que mi vida ha estado y espero
que esté durante muchos años, dedicada a la radio que tantas satisfacciones me
ha dado y que a pesar de los años transcurridos, mi afición va en aumento cada
vez más
Cada carta que le escribía a la que hoy es mi mujer, adornaba el sobre con un dibujo, con todos he montado una colección y es muy entrañable, son muchos recuerdos ¡¡¡¡¡¡
En este cuartel de Alfonso I, de artilleria nº 29 de alta montaña,situado enfrente de la estación del tren en Huesca, estaba ubicada la compañia de sanidad de la brigada de alta montaña BRIAM en la cual presté mi servicio militar de conductor, después de pasar tres meses en el campamento CIR 10 de San Gregorio en Zaragoza,donde hice el curso de conductor de camiones pesados, un campamento muy moderno y en fase de expansión ya que estabamos 5.000 soldados y se estaba ampliando para 5.000 mas, donde también colaboré con trabajos de electricista. También guardo un grato recuerdo de las maniobras que hicimos en el pirineo de Huesca con unos parajes extraordinarios por su belleza, con los valles por los que estuvimos acampados, por la nieve en pleno mes de agosto, por sus rios de frias aguas donde nos costaba de meternos para hacernos pasar el calor, subiendo y bajando montañas con un Dodge 3/4, un vehiculo todo terreno muy potente y muy duro de conducir. Quizás fuera una paradoja de la vida, el que me tocara hacer el servicio militar en la tierra de mi madre, aragonesa ella, de Villarluengo, el paraiso de la trucha, en la provincia de Teruel, donde tuve a unos abuelos a los que nunca pude llegar a conocer por las circunstancias de la vida y una tierra por la que siento adoración. Durante el año que me tocó vivir en Huesca, tuve ocasión de visitar muchos pueblos de las tres provincias y conocer mucho mejor a esta noble gente, tan acogedora y de la que guardo muy buenos recuerdos. Allí también se forjaron muy buenas amistades y a pesar de estar tan lejos de los seres queridos, también pude pasar ratos muy agradables. Siempre que me ha sido posible, hemos ido con mi esposa a dar la vuelta a las tres provincias del Aragón y no me cansaría nunca de ir, a pesar de que allí ya me queda muy poca familia. Desgraciadamente, este magnifico cuartel, ya no existe y en el solar se encuentran edificados muchos bloques de viviendas y es que en esta vida, todo cambia.
Lamparas de soldar de gasolina Serrot, que usabamos mi padre y yo, el me enseñó el oficio de Fontanero Electricista. Son del año 1961, cuando yo empecé a trabajar con mi padre ,hasta su jubilación y posterior fallecimiento, estuve a su lado.
Molinillos de café, uno de mi madre y otro de su hermana, mi tía y madrina, con ellos había preparado mucho café, me encantaba usarlos hace setenta años ¡¡¡¡¡¡